La cistectomía de ovario se trata de la cirugía donde se eliminan los quistes de ovarios manteniendo al ovario intacto, sin necesidad de extirparlo por completo. Siendo así, es un procedimiento que favorece la fertilidad de la paciente.
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¿Por qué hacer una cistectomía de ovario?
La cistectomía de ovario se realiza cuando es necesario eliminar el quiste de un ovario. Si bien los quistes de ovarios suelen ser benignos, en algunos casos son un problema cuando se vuelven muy grandes, son dolorosos o hay riesgo de cáncer.
El procedimiento de cistectomía de ovario es recomendable si hay crecimiento de masas ováricas, si hay un quiste ovárico de más de 7.6 cm, si el quiste no se reduce ni se desaparece en el plazo de tres meses o si los exámenes previos sugieren que el quiste no es funcional.
Además, si la paciente con una masa ovárica anormal es una niña sin desarrollarse, es una mujer posmenopáusica, usa anticonceptivos orales o se sospecha de un cáncer de ovario, entonces es candidata para la cistectomía de ovario.
Cistectomía de ovario por laparoscopia o por laparotomía
La cistectomía de ovario puede hacerse por laparoscopia, es decir con una pequeña incisión, o por laparotomía, una incisión abdominal de mayor tamaño. En ambas suele usarse anestesia general.
Laparoscopia
Sí la cirugía es por laparoscopia, la recuperación es más rápida y las actividades rutinarias pueden retomarse en pocos días. Pero se debe evitar hacer esfuerzos o ejercicios fuertes en la primera semana.
La cistectomía por laparoscopia amerita insuflar gas en el abdomen, lo que puede ocasionar molestias durante el par de días siguientes al procedimiento. Se puede padecer de dolor en el cuello y los hombros tras una laparoscopia, debido a que dióxido de carbono irrita al diafragma. Pero a medida que se vaya absorbiendo el gas, el dolor va desapareciendo. Aunque es recomendable acostarse para que el dolor disminuya, sigue siendo un procedimiento que no requiere muchos días de recuperación y que, como otra ventaja, tampoco deja grandes cicatrices.
Laparotomía
La cirugía por laparotomía tiene una recuperación más lenta, permaneciendo hospitalizada una par de días y retomando las actividades cotidianas tras pasar un mes desde la operación. No obstante, es el procedimiento que se prefiere si hay sospecha de cáncer, pues este tipo de cirugía permite ver mejor los órganos abdominales y pélvicos, y de estar ante un cáncer de ovario facilita la eliminación del mismo de forma completa y segura.